Bajo el abrasante sol dibujado en el horizonte, Sam merendaba con su hermano Jackson, después de un largo día de recolecta de maíz. La sopa de Sam reflectía la brillante luz que desprendía el sol, y Jackson, terminando su sandía, se recordó que le habían quedado varias semillas por sembrar. Jackson avanzó por el maizal. El espesor de las cañas le rodeaba. Siguió andando, y poco a poco se fue internando cada vez más. Se había perdido, pero eso no era lo peor. Desde el profundo maizal resonaban los ensordecadores granidos de los cuervos. No estaba solo. En la distancia, las cañas empezaron a moverse en dirección a él. Algo se le estaba acercando. Una capa ajada se lanzó hacia él, y un rostro deforme le voceó:
-¡¡¡QUIERO SABER A QUE SABE TU CARNE!!!
Un zarpazo le rasgó los intestinos, y las cañas se vieron salpicadas de sangre.
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Una semana después.un policía decidió investigar el caso. Llegó al maizal. No había nadie en la casa. Se internó dentro del maizal. Un nauseabundo olor llegaba de cerca. Unos cuervos, con trozos de carne en el pico, presagiaban lo que iba a encontrar:
Los cadáveres de Sam y Jackson, los granjeros, yacían muertos, destripados y putrefactos entre las cañas. Un segundo después, notó un caluroso aliento en la nuca. se volvió y observó su doloroso final.
(fragmento de mi libro delirios de un cadáver)
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6 comentarios:
Mola
Un buen fragmento
muchas gracias.es de un libro que estoy escribiendo.
pinta bien
muchas gracias
Me gustó muchos, es mi temática predilecta =)
yo también escribo cuentos cortos de terror y me gustaría publicar los del año pasado recopilados.
creo que te gustaría leerlos hay de todo desde micro hasta algunos con capítulos. El blog Cuentos desde el Averno la dirección ésta:
http://wwwcuentosdesdeelaverno.blogspot.com
un saludo y a seguir escribiendo!
graciaaaasss... ;)
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